Los colines son como las patatas snacks, cuando empiezas… ya no paras y acabas con todo. Seguro que te ha pasado que antes de servirte la comida en un restaurante te han puesto el cestito de colines, y cuando llega la comida… ¡han desaparecido! Parece que los colines como son “ligeros”, no engordan y son ideales para dietas de perdida de peso, esto no es así, todo lo contrario. Es una pequeña bomba de calorías a base de grasas “trans”, por eso están tan ricos.
Los ingredientes de los colines y crackers son los mismos que se utilizan para el pan pero con la gran diferencia que se le añaden grasas o aceites vegetales, esto aporta mejor sabor y conservación, sin embargo estas grasas “trans” no solo aportan muchas más calorías, sino que además no son muy saludables. Este tipo de grasas utilizadas sobretodo en la bollería industrial, elevan el colesterol malo y están directamente relacionadas con la formación de ateromas en las paredes arteriales, como ves, nada saludable para personas con sobrepeso o problemas cardiovasculares.
Estos sustitutos del pan son más ligeros (solo en peso) ya que tienen menor contenido de agua, pero en realidad, al contener más nutrientes, sobre todo grasas vegetales, aportan más calorías. Seguro que te ha pasado que cuando te ponen un cuenco de colines… es empezar y no parar, esto es porque llenan menos y continuamos comiendo más.
Debemos tener presente que unos 100 gr de colines tienen un poder calórico equivalente al de 160 g de pan.
