juanluvenegas

juanluvenegas

lunes, 18 de marzo de 2013

MOTIVOS PARA ALIMENTARSE TRAS ENTRENAR


Existen multitud de motivos por los que deberíamos pensar que es adecuado realizar una ingesta de alimentos justo al terminar nuestra sesión de entrenamiento:

Vasodilatación: cuando trabajamos unos determinados grupos musculares se produce una dilatación de los vasos sanguíneos que irrigan dichos músculos, al encontrarse en estado dichos vasos se facilitará la llegada de nutrientes a los músculos entrenados.

Aumento de la síntesis proteíca y glucógeno: sabemos que durante una sesión las reservas de glucógeno se ven disminuidas principalmente para la producción de ATP. El ejercicio incrementa la producción de insulina, hormona encargada de transportar nutrientes al músculo y de la glucógeno sintetasa, enzima encargada de la síntesis de hidratos de carbono en glucógeno. Sin embargo también existen otras investigaciones que advierten de una mayor síntesis de proteína a partir de las 2 – 48 horas post-ejercicio por lo que no sólo es interesante ingerir proteína justo al terminar la sesión de entrenamiento si no también durante las horas posteriores.

Ambiente hormonal: por todos es sabido que un entrenamiento  bien planificado está acompañado de un incremento de hormonas anabólicas como la testosterona, hormona del crecimiento (GH), IGF-1, insulina y somatomedinas. Todas estas hormonas favorecen la síntesis proteica por lo que un aumento de todas ellas por encima de sus valores basales favorecerán y estimularán este proceso.

Contrarresta el catabolismo:  sesiones excesivamente intensas y/o duraderas provocan la secreción de cortisol por encima de sus valores basales. Pero la ingesta de proteínas acompañada de hidratos de carbono ayudarán a revertir este ambiente catabólico en anabólico.