Realizar actividad física regular es un hábito muy saludable para prevenir enfermedades pero también para mejorar su condición si ya las padecemos.
Al
tener una conducta sedentaria, con el paso de los años, el cuerpo comienza a
sufrir cambios debido a que no se lo ejercita a pleno.
Los efectos sedentarismo son:
-si
la persona tiene mala postura corporal se producen problemas
relacionados a este mal hábito, ya que el ejercicio ayuda a corregir
este tipo de afecciones
-se cae el vientre, aparece flacidez en piernas y brazos aunque se sea delgado por la falta de tonicidad en los músculos
-se acumula estrés y baja la autoestima
-aumenta el riesgo de desgaste de ligamentos, articulaciones, columna vertebral
-problemas de movilidad
-desarrollo de enfermedades óseas como la osteoporosis
-aparición de malestares de columna como ciática, lumbalgia, etc.
-contracturas en la espalda que producen mucho dolor
-evita el deterioro cognitivo
-ayuda a combatir el envejecimiento
-aumenta el riesgo de mortalidad prematura
-mayores riesgos de sufrir lesiones musculares y de huesos
Para
estar saludables no alcanza con una dieta saludable y no fumar o beber
alcohol. Es vital realizar actividad física para evitar que el cuerpo
se deteriore por falta de ejercicio.
El ejercicio regular es un
hábito que toda persona sin importar su edad debe practicar diariamente
para estar bien de salud y tener una buena calidad de vida.
Moverse y ejercitarse alarga la vida por lo que debemos tomarnos un tiempo todos los días para ejercitarnos.