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¿cúantos huevos puedo comer......?, en vista a la curiosidad que despierta dicha información he querido profundizar un poco más con este artículo.
Aquí os dejo la respuesta a algunas preguntas que la mayoría nos hacemos.
El huevo es un alimento muy apreciado y uno de los
que tienen especial interés dentro de la dieta alimenticia de todos
nosotros. Es destacable el papel que tiene en la alimentación deportiva,
ya que contiene altas cantidades de proteínas
de muy buena calidad, que nos ayudará a conseguir unos músculos fuertes
y en perfecto estado. A pesar de esto, muchas son las dudas y los
miedos que han surgido entorno a este alimento.
Al tratarse de un alimento habitual y presente en nuestra dieta de manera constante,
siempre ha estado en el ojo del huracán,
y mucho es lo que se ha escrito y hablado sobre sus múltiples
beneficios y perjuicios. En esta ocasión lo que se pretende es
aclarar algunas dudas con respecto a este alimento tan habitual.
¿Consumir claras crudas?
En primer lugar nos vamos a detener en una creencia que se viene aplicando desde hace muchos años, y consiste en
recomendar la ingesta de claras de huevo crudas
para mejorar la salud. Esta creencia presupone que consumir de este
modo el huevo, es mucho más saludable por ofrecernos más proteínas con
menos aporte graso. Realmente esto es un error, ya que la proteína del
huevo consumida de manera cruda no se asimila por el organismo. Para su
correcta asimilación es necesario que la sometamos a la acción del calor
que se produce al cocinarlo, ya que esto hará que las proteínas cambien
su composición, pudiendo ser asimiladas por el organismo.
¿No pueden consumirse más de tres veces a la semana?
De los huevos también se dice que no pueden consumirse más de
tres veces a la semana,
ya que contienen altas cantidades de colesterol y grasa. Esto no es del
todo cierto, y es que sí que es verdad que la grasa se concentra en la
yema del huevo, pero el aumento del colesterol no depende solamente de
este alimento. Intervienen varios factores como el resto de la alimentación que seguimos en nuestro día a día y la actividad física que llevemos a cabo.
¿Daño para el hígado?
El
daño que pueden causar al hígado
los huevos es otra de las creencias extendidas acerca de este alimento.
Es cierto que en exceso nada es recomendado, y precisamente esta
creencia se debe a las altas cantidades de proteínas que contiene este
alimento. Un exceso de proteínas puede ser perjudicial para el hígado
debido a que éstas se asimilan a través de este órgano. Si controlamos
la ingesta de huevos este alimento será muy beneficioso para el
organismo, evitando así el riesgo de dañar el hígado.
¿El tamaño y la forma de los huevos?
En cuanto a
la forma y tamaño
de los huevos también existen muchos mitos y creencias. El primero es
que los huevos cuanto más grande mejor porque contienen más nutrientes.
Esto no es verdad, ya que por norma general los huevos más grandes los
ponen las gallinas más viejas. Estos ejemplares suelen contener menos
nutrientes y tener un sabor mucho menos rico. También la cáscara es más
delgada, por lo que el riesgo de que el huevo sea infectado por
microrganismos es mayor.
¿El color de los huevos?
El
color de los huevos
es otro de los puntos que se ha cuestionado sobre este alimento, y es
que el color no determina nada en relación a los nutrientes que éstos
contienen. Simplemente el color se debe a una pigmentación que se
produce en la cáscara y que tiene que ver con el tipo de gallina, la
alimentación que lleva… La estructura del producto es la misma, sea de
uno u otro color. Por ello es importante que sepamos estas cosas para
saber elegir y no discriminar este alimento por creencias sin
fundamento.