El potasio es un nutrientes muy reconocido por su relación con el sistema neruomuscular, pues tanto su déficit como exceso pueden ocasionar alteraciones contráctiles. Sin embargo, este mineral no sólo es de utilidad para los músculos, sino que su presencia en el organismo en cantidades apropiadas puede beneficiar otros órganos y funciones.
El potasio, además de ayudar a un buen funcionamiento del sistema nervioso y muscular, colabora con las siguientes funciones:
- Contribuye a mantener el equilibrio de fluidos en el espacio dentro y fuera de las células, por lo tanto, si queremos conservar una buena hidratación, no debe faltar potasio en nuestra dieta.
- Participa en la síntesis de proteínas y es indispensable para el crecimiento muscular y óseo.
- Mejora el control de la glucosa en sangre, ya que interviene en su metabolismo y es necesario para convertir glucosa en glucógeno.
- Favorece la regulación de la presión arterial y dietas ricas en potasio se han asociado a niveles menores de tensión arterial en el organismo.
- Mejora la salud ósea y se ha asociado a menor riesgo de osteoporosis por proveer un medio ácido que permite mantener el calcio en el mismo.